Intel pronosticó el jueves unos ingresos trimestrales por debajo de las estimaciones del mercado, mientras lidia con la incierta demanda de sus chips utilizados en los mercados tradicionales de servidores y ordenadores personales.

La compañía con sede en Santa Clara, California, espera unos ingresos ajustados para el primer trimestre en el rango de 12.200 a 13.200 millones de dólares, frente a la estimación media de los analistas de 14.500 millones de dólares, según datos de LSEG.